En el post de hoy hablaremos sobre tres técnicas de decoración bastante sencillas una vez se domina la técnica.
A todos nos gusta lucir unas uñas bonitas y a nuestro gusto, así que, ¿Por qué no aprender algunas técnicas para darle un nuevo toque a nuestra manicura?
Empezaremos desde la más sencilla a la más compleja.
¡Ojo! No nos asustemos, todas las podemos dominar con la práctica.
Repasemos los materiales
Los siguientes materiales serán comunes para las tres técnicas que vamos a comentar.
- Esmaltes semipermanentes
- Gasitas sin pelusa
- Líquido limpiador
- Gel paint
- Pinceles
- Dotting tools
- Y por supuesto nuestra lámpara UV/Led

Dotting
Se conoce como Dotting o punteado, ya que consiste en eso, en crear un diseño a base de puntos con herramientas de cabeza redonda.
Para realizar esta técnica no hay pasos ni reglas que seguir. Únicamente necesitaremos esmaltar la uña con un color base y después coger nuestra dotting tool y empezar a crear con puntos.
Existen infinidad de diseños y lo mejor de todo es que no hay ninguno que esté mal. Al fin y al cabo… ¡Son sólo puntos!
Arabescos
Los arabescos son composiciones a partir de comas realizadas normalmente con gel paint ya que su consistencia permite un mejor acabado de los resultados.
Para realizar esta técnica, de nuevo no hay normas que seguir. Únicamente necesitaremos esmaltar la uña con un color base e ir realizando nuestro diseño con un pincel fino y gel paint (En su defecto también se puede usar esmalte semipermanente si este tiene una consistencia más espesa).
Podemos crear miles de diseños a partir de una única coma, y es que, en mi opinión, esta es la técnica más dinámica de las tres. Permite cubrir la uña entera de preciosos arabescos, realizar una francesa con ellos o decorar una esquina. ¡Cualquier cosa vale!
Ombré
La técnica del ombré, también llamada degradado o desvanecido, puede parecer la más sencilla, pero requiere de un poco de práctica para conseguir degradados perfectos entre colores.
Para realizar esta técnica sí hay algunos pasos que debemos seguir si queremos un resultado óptimo:
- Aplicaremos una capa fina de los colores que hayamos escogido en las zonas donde deberían ir, atendiendo a la dirección del desvanecido (Vertical, horizontal o diagonal).
- Con un pincel de abanico o con uno especial para degradados haremos movimientos circulares muy sutiles en la zona de unión entre cada color.
- Repasaremos cada zona cuidadosamente hasta que estemos contentos con el resultado y finalmente curaremos en la lámpara.
Se puede realizar con dos colores o con una gama más amplia. Es recomendable usar varias tonalidades de los colores escogidos para facilitar el degradado entre ellos. También la mejor opción es comenzar por el color más oscuro.